lunes, 18 de junio de 2012

CAPITULO TERCERO


Este capítulo es uno de los que más sonrisas me sacan, es divertido. Y esta dedicado a Mixi , como un presente en su cumpleaños. Mixi espero que te guste, y aunque ya se vaya a acabar el lunes , igual te deseo muchas felicidades. Te regreso el cap que le regalaste a F, cuando aun no me animaba a poner Alexandra. Gracias de verdad por compartir tus historias, y creo que ya lo sabes pero lo diré, eres una mis escritoras favoritas, he aprendido mucho de la forma tan única y maravillosa en la que escribes :) . Ahora a leer. 

LAS MEJORES FIESTAS OCURREN FUERA DE CASA





“La felicidad proviene de la capacidad de sentir profundamente, de disfrutar simplemente, de pensar libremente, de arriesgar la vida, de ser necesitado”
Storm Jameson 

La fiesta fue amenizada por uno de los DJ más famosos del momento, la música alcanzaba decibeles peligrosos para el oído humano, y eso junto con las bebidas mezcladas con alcohol que se servían, ponía a todo el mundo en estado eufórico. En contraste con el ambiente de discoteca que se vivía en el lugar, todos vestían de gala, los chicos con trajes negros hechos a la medida, las chicas con vestidos de diversos colores cada uno con un sello de diseñador diferente, todos exclusivos.

--- ¡¡Pierre!! Pensé que no vendrías mi amor, moría por verte- no esperó a tener respuesta, Valery se precipitó a los brazos de su novio, dándole un apasionado beso en los labios, que de inmediato el retomó, prescindiendo de cualquier saludo.

---Hubo un pequeño contratiempo con el auto, tu sabes que siempre soy puntual y más cuando se trata de verte, muñeca-lo dijo, aun sabiendo que su novia odiaba que la llamara “muñeca”.

En realidad Pierre nunca tomaba demasiado enserio la opinión de Valery, para él todas las chicas tenían lo mismo en la cabeza, lo cual era muy poco, y por eso se daba el lujo de tratarlas a todas igual, incluso cuando su novia era hija de un político influyente de la ciudad donde vivían, siempre tuvo claro que no era nada serio, podía cambiar de conquista en el momento que se le antojase y en ese momento no se le apetecía. Sobre todo porque la relación no era muy complicada, fingía interés, compraba regalos costosos y a cambio recibía momentos íntimos y apasionados, por supuesto como en todo algún sacrificio debía hacer y en dos o tres ocasiones tuvo que pretender que el: “Te amo” que salía de sus labios era verdadero, era una buena forma de terminar una pelea cuando ya no quedaba como recurso la indiferencia.

---No te preocupes amor, está bien- lo dijo, al mismo tiempo que sus dedos despeinaban el cabello de su novio, ella realmente estaba enamorada.

  --- Pero ¿no vas a presentarme a las nuevas integrantes de la fraternidad? creo que podría ayudarte a mantenerlas a la vista, y que ninguna de ellas se meta en problemas- un toque de cinismo paso por su rostro, ya que lo había dicho frente a dos señoritas que estaban casi junto a ellos, y a las cuales Valery se vería obligada a presentarle.

---Buenas noches, están muy elegantes- Valery se dirigía a Sol y a Karlhy que estaban junto a ellos.

La respuesta fue un seco <gracias, tú igual> ninguna de las dos tenía intenciones de entablar conversación con la presidenta, la impresión que había causado en ellas  no era la mejor y además estaba acompañada de un tipo con ojos oscuros que las observaba como si fueran un pedazo de carne y el un depredador, las miradas dirigidas a Karlhy eran particularmente incómodas.

---Les presento a Pierre, mi novio- la presidenta tomo la palabra de nuevo, ahora mirando con ojos de enamorada a su acompañante- el pertenece a la fraternidad Delta y…- fue repentinamente interrumpida por el chico.

--- Y estoy a su completa disposición señoritas – guiño un ojo con astucia- para cualquier dificultad como nuevas estudiantes, puedo mostrarles personalmente el campus, o ayudarles a encontrar los salones de clase, tantos pasillos pueden ser abrumadores, no estaría bien que dos chicas bellas…- a pesar de su desfachatez , su novia no reaccionó con enojo, y por extraño que parezca mantenía una sonrisa mientras movía la cabeza confirmando lo que Pierre decía-  se perdieran habiendo un caballero…- se acercó a Karlhy un poco, lanzando una mirada que la incomodó mucho más- como yo que puede ayudarles.

---Gracias pero ya conocemos el campus, y los salones están numerados no tendremos ningún problema- Sol tomó la palabra, pellizcando a su amiga para que se alejaran del lugar.

--- Además creo que nuestros novios no estarían de acuerdo- Dijo Karlhy, con un tono serio para que pareciera creíble- Son un poco celosos- terminó la frase.

--- Y ya nos están esperando, están por allá- Sol miro a un par de chicos que estaban a unos metros y los saludo con la mano, al ver esto Karlhy la imitó; los chicos un poco sorprendidos rieron mientras les seguían la corriente.

--- Hasta luego- se adelantó a decir Karlhy. Sol sonrió hipócritamente, antes de salir prácticamente corriendo.
Pierre no dijo nada, pero notó la antipatía que mostraron las muchachas. Valery se rio entre dientes al ver que la jugarreta de su novio por primera vez en mucho tiempo había salido mal. Ella soportaba continuamente la coquetería que Pierre no se molestaba en ocultar y aunque no le agradaba, lo aceptaba, porque < ¿quién podría vivir sin el amor de su vida? acaso el verdadero amor no se trataba también de aceptarse tal cual, de aceptar los errores del ser amado, de sacrificarse por él, ¿quién sería ella sin Pierre a su lado?, lo necesitaba, lo amaba y no dejaría que se alejará de ella, jamás, así tuviera que tragarse la amargura de su trato y fingir que todo iba bien>. Esto pasaba por la cabeza de la presidenta mientras observaba a su novio saludar a otro par de recién llegadas, se acercó a él y lo tomó de la mano.

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--- Uff que asco ese tal Pierre, pero como puede estar con Valery, ella sí que debe tener la autoestima por los suelos si deja que su novio se comporte así en sus narices – Karlhy apenas podía reponerse de las náuseas que Pierre había causado en ella, el solo pensar de nuevo en esa sonrisa retorcida la hacía ponerse verde del malestar.

--- Si es un patán… entre otras cosas, y se  cree un dios griego, me recuerda a mi ex novio…no se ni como pude soportar los seis meses que estuvimos juntos- No era un tema que a Sol le encantara discutir por lo que espero que Karlhy no preguntara más.

--- Hmmm- Karlhy se dio cuenta de que en el rostro de Sol había preocupación mezclada con disgusto, seguramente porque no había sido una buena experiencia y pensaba que ella la interrogaría- bueno pero ya lo pasado en el pasado está ¿no?- sonrió mientras veía el rostro de Sol relajarse- ahora estas en Italia, y Venecia es la ciudad del romance , así que de seguro la vida te recompensará con un chico como…- miró a su alrededor en busca de algún muchacho guapo que pasara por ahí , el primero que vio fue un muchacho que bien podría estar en la selección de futbol americano, por lo ancho de sus hombros - como ese – apunto con su dedo rápidamente.  

--- No señales- Le dijo nerviosa- No está mal, es atractivo, quizás un poco bajo pero no se puede tener todo- Sol no mostró demasiado interés en el chico, y siguió caminando para tomar una bebida de la barra.

Karlhy rio --- No te emociones tanto que me vas a contagiar… y no está tan bajo ¿tú quieres un gigante?- menciono siguiéndola por el salón para sentarse en un sillón vacío.

El comentario le saco una sonrisa a Sol---No, pero me gustan altos… y está bajo si lo comparas con… - busco a algún otro chico que se acercara más a sus expectativas- ah, el tipo de barba junto a él.
--- ¿Te gusta el de barba?... Hmm, demasiado malo para mi gusto, pero tú puedes presentarte- Karlhy sorbió de su piña colada mientras levanto las cejas de forma graciosa para acentuar la propuesta.

--- Ni loca, no voy a presentarme, y si lo hiciera sería al que tu indicaste, está mucho mejor… no me gustan las barbas, creo que son…-   Sol hizo un mohín con su cara y Karlhy completo la frase <<Sucias>>, dijo, ambas chocaron las manos.

La vista de Sol regreso al chico de esmoquin, no todos tenían el porte para llevar uno, y él era de los pocos afortunados, vio en la distancia que sus ojos eran claros pero no supo distinguir su color especifico, sonreía de esa manera suficiente y confiada, como cuando se sabe lo que la presencia de uno provoca en los demás, era una buena sonrisa, pensó.

--- Bueno es solo un chico, hay muchos y apenas es el primer día mejor vamos a bailar.- Propuso Sol.

Valentina, una de las amigas de Valery también se percató del muchacho del esmoquin, a diferencia de Sol ella tomó acción a la menor oportunidad, cuando su amigo por fin se marchó, ella se acercó con una mirada seductora y su vestido azul marino de escote muy pronunciado, sabía que era de nuevo ingreso, pero que más daba, si al fin y al cabo era guapo y lo vio llegar en un BMW, eso ya significaba muchos puntos a favor.

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*Unas horas antes de la fiesta*


Cuando eligió Italia para estudiar  la universidad, no pensó que estar tan lejos de casa le hiciera tener miedo, pero así era, Canadá no se parecía en nada a Venecia ahí todo parecía sacado de un libro de historia universal, ella hablaba a perfección el italiano como legado de su abuela materna, pero su acento y su aspecto delataban que no era natal de esa ciudad. Violet Johnson usaba sus tenis favoritos, creía que le traerían buena suerte, eran unos converse  negros con una franja blanca; no era simpatizante de los tacones y su altura le permitía darse el lujo de prescindir de ellos. Su cabello oscuro y liso enmarcaba su rostro y hacia resaltar su tez blanca; solía usar camisas básicas de diferentes colores y estampados, que hacían juego con los jeans.

Uno de sus pasatiempos favoritos era correr, la hacía sentirse libre, más tarde se interesó por otro tipo de deportes y terminó formando parte del equipo de natación de su secundaria, luego de su Estado y últimamente de la Universidad de Venecia, así fue como consiguió la beca, era una oportunidad imperdible sobre todo porque la institución tenía mucho prestigio, decidió estudiar Ingeniería eléctrica, y de paso conocer una de las ciudades que su abuela había frecuentado antes de migrar a Canadá. Lo más difícil fue dejar a sus seres queridos, recordaba a sus padres dándole consejos y obligando a prometer que les llamaría a cada uno, que estuvieran divorciados desde que ella tenía uso de razón, duplicaba las normas; sus hermanos eran muy molestos, pero aun así, quizás los llegase a extrañar, suspiró mientras miraba su muñeca derecha donde colgaba la pulsera que le regaló William antes de partir.

William, el solo pensar en él la hacía sonrojarse, estaba muy enamorada del que era su novio desde hace poco más de un año; el entendió sus razones para viajar y por supuesto prometió que hablarían cada día y que estaría en el aeropuerto el día de su regreso para vacaciones. Ella confiaba en él, por lo que procuraba pensar en que la distancia seria su amiga y solo lograría reafirmar su amor, aunque algunas veces la inseguridad le hablaba bajito al oído y perturbaba sus pensamientos, ella la ahuyentaba inmediatamente y tomaba el móvil para llamarle. Venecia era toda una aventura que no pensaba desaprovechar.

--- ¿Eres tú? ¿Blanca?- lo dijo mientras se acercaba a una chica en la fila de la cafetería, había ido a comprar algún refrigerio luego de ordenar la mayor parte de sus pertenencias en el cuarto que le designaron.

--- ¡¡Violet!! ¿pero qué haces aquí? – le dio un pequeño abrazo y una expresión de sorpresa posaba en su cara- ¿Cómo es que estás en Italia? pensé que estudiarías en Estados Unidos.

---Yo también lo creí, pero ya ves que no – Violet se sintió aliviada de conocer al menos a una persona en ese lugar.

--- ¡¡Genial!! Eso quiere decir que seremos compañeras, al menos de Universidad.-

Blanca conoció a Violet un año atrás cuando estuvo en Canadá 6 meses en el último año de secundaria,  se hablaron por primera vez gracias a que estaban juntas en el club de deportes y cuando ella regresó a España siguieron teniendo comunicación por mails y chats, Violet había insistido mucho en que Blanca debería crear una cuenta en Facebook, pero Blanca no estaba interesada, veía ese recurso como innecesario. Con todo y un mar de por medio, lograron cultivar una buena amistad.

--- Tienes razón, pero pongámonos al día, que ha pasado en tu vida en estos meses, por mi parte no hay muchas cosas nuevas que contar, mejor cuéntame tú, ¿ya hay algún muchacho por ahí? …- Conversaron mientras atravesaban uno de los jardines frente a un anticuado edificio.

Fue en ese momento que Blanca notó a una chica con el cabello un poco despeinado, debido al viento que azotaba con fuerza, la reconoció de inmediato <<¡¡Luna!!>>, gritó dos veces antes que la recién llegada volviera la vista hacia donde estaban ella y Violet.
Luna se acercó un poco dudosa, ella era un poco tímida y la situación que acababa de vivir no era muy normal que se diga, <todo lo normal que puede significar espiar a un extraño, sentirse extrañamente atraída a por él > pensó mientras se acercaba a las muchachas.

--- Hola, hmmm- pensó un poco- Blanca, ¿verdad?- Blanca respondió con una sonrisa y un <<La misma >>, le presentó a la chica que la acompañaba y al cabo de unos minutos ya habían intercambiado sus primeras impresiones sobre la Universidad, sobre las respectivas carreras que estudiarían y los lugares de los que provenían.

Luna se percató que el sol ya se había extinguido casi en su totalidad, y recordó las palabras de Frank <nos vemos a las 7 en punto en la entrada del edificio, llega a tiempo porque si no entrarás sola a la fiesta de bienvenida  >, quiso ver la hora pero recordó que su móvil seguía en su habitación, le preguntó a una de sus nuevas conocidas y de pasó las interrogó sobre si asistirían o no a la celebración de apertura para todas las facultades; las chicas respondieron afirmativamente, minutos después las tres estaban en camino a arreglarse.

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El salón principal estaba lleno de estudiantes, muchos bailaban, algunos bebían y varios platicaban mientras se limitaban a observar. La música provenía de unos aparatos de sonido conectados a grandes bocinas y que lograban producir un sonido estridente propio de la música electrónica que sonaba en ese momento.

---Estar con ustedes es igual que asistir a un funeral-  Frank le dio un trago a la primera cerveza de la noche, cortesía de un grupo de tercer año y observó a su hermana y compañía lamentándose no poder solo marcharse, su hermana no se lo perdonaría- parecen cadáveres- se ganó una mirada recriminatoria de las tres.

--- Ve tú, nosotras estamos bien, viendo como todo el mundo se embriaga y hace el primer ridículo de sus años universitarios- contestó Luna, al tiempo que Violet y Blanca se reían observando a un muchacho evidentemente borracho que no conseguía mantener el equilibrio al bailar.

--- ¡¡Cómo es posible que la administración no consiguiera un buen DJ para esta ocasión!!- sentenció Violet al ver el ambiente poco atrayente que se vivía en la “grandiosa” fiesta.
--- Tal vez sea porque ya lo han contratado para la fiesta de las fraternidades, ustedes saben cómo es eso- dijo Blanca, tomando un poco de la soda que tenía en la mano.

--- ¿Fiesta de las fraternidades?- Luna estaba un poco curiosa por el comentario, no porque quisiera escuchar a algún DJ, sino porque se preguntaba si el extraño que vio tocando la  guitarra podría estar en la otra fiesta. Pronto sacudió sus pensamientos, no debía darle tanta importancia.

--- Aja, la fiesta que hacen los chicos de las fraternidades, mi padre me ofreció entrar en la casa de las Alfa, pero yo nunca he sido partidaria de eso, es decir qué diferencia hay entre convivir con… - No pudo terminar la pequeña explicación sobre su disgusto por las personas clasistas, porque Violet la interrumpió.

--- ¡Pues entonces vamos allá!, yo quiero tener un buen recuerdo de mi primera fiesta como Universitaria, con tanta gente ahí, ni siquiera notaran que no somos de la dichosa “fraternidad”- se levantó de un salto de su asiento, la idea no era del todo descabellada, a Frank le parecía bien, pero Luna nada que fuera contra las reglas lo tomaría como algo bueno.

--- ¡¿Qué?! no chicos, aquí estamos bien, nuestra fiesta no tiene nada que envidiarle a la de ellos- Blanca no pudo ocultar su propia risa, lo que acababa de decir no era ni un poco creíble, así que se limitó a seguir a sus amigos, que ya se dirigían a la fiesta vecina.

El salón común de las Alfa era una casa grande junto a la cual había una fuente con un ángel en medio, los jardines albergaban distintos tipos de flores, cuyos colores no se podían distinguir por la oscuridad, la seguridad no eran más que un par de hombres con trajes negros que bebían ron en una esquina, por lo que pudieron entrar sin ningún contratiempo.

Frank silbo--- Esto si es una fiesta- fue el primero en entrar a la casa de las Alfa- Oye Luna ¿qué era lo que decía el presentador de ese programa que veías?- dijo por sobre la música, las luces producían sombras por todos lados.

--- Las mejores fiestas ocurren fuera de casa- respondió Luna, mareada por la ola de cuerpos que se apretujaban frente a ellos.

--- Ahora sé porque es bueno pertenecer a una de estas fraternidades – comentó Violet.
Violet y Frank se unieron a la fiesta, alejándose en medio del salón al ritmo de la música electrónica, Luna los observó y acto seguido echo un rápido vistazo por todo lo ancho de la enorme sala, en su interior se daba cuenta a quien buscaba, así que se reprendió nuevamente y puso por fin atención a la conversación que Blanca le ofrecía.
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---Entonces ¿cómo dijiste que te llamas?- preguntó una chica de cabello rubio que usaba un vestido azul marino.

--- Aun no te lo digo- respondió el joven  con esmoquin negro - mi nombre es Santiago, ¿tú también eres de nuevo ingreso?- continuó

--- Soy de segundo, me llamo Valentina- él le tendió la mano, pero ella se adelantó a saludarlo con un pequeño beso de mejilla- mucho gusto Santi, puedo llamarte Santi ¿cierto?- su voz tenía un toque seductor que su acompañante no paso por alto.

--- Así me dicen mis amigos- el trató de no hacer ningún tipo de gesto que la chica pudiera malinterpretar, a pesar que era una jovencita muy atractiva, no le gustaba su actitud de “cazadora”, era a él a quien le gustaba interpretar ese papel, además su arrogante y en la mayoría de veces engreído carácter le hacía creerse irresistible para cualquier chica que el “eligiera”, sentirse “elegido” no era la sensación que le gustaba experimentar a su muy bien nutrido ego.

---Ya veo, entonces ya somos amigos- sonrió con coquetería- eres italiano verdad, ¿de qué ciudad exactamente?, y tu apellido, aún no me lo dices, quizás lo reconozca, mi padre tiene muchos conocidos…- para alivio de Santiago, su acompañante tuvo que callar porque la presidenta tomó el micrófono y anunció el siguiente juego de la noche.

--- Ya hay un ganador del tesoro escondido, ahora haremos un concurso de baile, sacaremos cuatro parejas, que serán elegidas al azar por nuestro DJ –se escucharon varios gritos y muchos aplausos- seguramente los contendientes serán unos completos desconocidos, lo que lo hace aún más divertido- de nuevo los aplausos ahora acompañados con silbidos – bien DJ Mark por favor, elija a los participantes.

Unos cañones de luz blanca se posaron sobre una jovencita que estaba al frente, el DJ señalo a otro chico en una esquina y así sucesivamente se fueron formando las parejas, algunos renuentes al principio tuvieron que ceder por la presión de sus compañeros, que se morían de ganas de ver quien hacia el mayor ridículo de todos. Sólo quedaba una pareja por elegir, y esta vez el cañón alumbro a una muchacha que lucía un vestido de dos tonos de rosa con un sencillo collar en forma de flor, su cabello suelto tenía por todo adorno un pequeño prendedor plateado del lado derecho que brillaba a la luz del reflector, el otro cañón se sitúo en un muchacho alto y de piel blanca que sobresalía de los demás porque su forma de vestir no era tan formal como el resto, camisa celeste de botones arremangada metida en sus jeans, sus ojos cafés se cegaron por un momento a la luz de la lámpara con la que se le señalaba, <es muy apuesto… ¿sin traje formal? ¿no será de la fraternidad?> pensó su pareja de baile, si no era de la fraternidad ¿Cómo es que estaba ahí? Su cabello ordenado y bien peinado dejaba ver que era de primer año, nadie que no fuera a la secundaria lo llevaba así, aun así… se veía bien en él.

--- ¡Amiga! Saldrás a bailar, yo me moriría de los nervios, ¿has bailado antes? , bueno si lo has hecho todo saldrá bien, y si no…-Karlhy hablaba rápidamente antes de que su amiga saliera a la pista de baile-  tranquila Sol no te pongas nerviosa, enséñales a todo ese grupo de criticonas que no tienes miedo, que aunque todos se rían de ti, y seas la primera eliminada tienes el coraje de pasar al escenario con la frente en alto y…- Sol volvió a verla con una mirada fulminante.

--- Gracias “amiga”- dijo Sol con tono sarcástico- por hacerme sentir como perdedora antes de siquiera salir a la pista, ¡¡ya no más palabras de ánimo por favor!!

---Solo quería animarte, pero no aprecias mi apoyo, ya te llaman… disfrútalo, que a pesar de lo que trae puesto, el chico no está mal- sonrió mientras veía a Sol tomar su lugar al centro del salón.

Se saludaron sin timidez, ninguno era el tipo de persona que se cohibía ante extraños, <Soy Sol y soy una Alfa… ¿tú eres un Bheta?>, apretó la mano que el muchacho extendía mientras se miraban a los ojos, no se sentía intimidada o nerviosa, tenía una extraña sensación agradable en el pecho <Frank… y no soy de por aquí> dijo refiriéndose a los muchachos de la fraternidad, Sol quiso preguntar más pero la canción estaba a punto de iniciar <Bueno, Frank…trata sólo de no pisarme demasiado ¿sí? Yo trataré de hacer lo mismo> sonrió ampliamente para matar los nervios que ya comenzaban a gestar, no por la presencia del chico… que se le hacía tan familiar, sino porque bailar en público era siempre algo aterrador en los primeros segundos. <Prometo pisarte solo unas cien veces y fingir que no me duelen tus pisadas> bromeo y ambos rieron, tomaron sus lugares y una canción conocida por ambos comenzó a sonar.

Él no lo dijo pero el baile era algo que disfrutaba, cuando niños lo solían practicar con su hermana y su madre, pero con el paso del tiempo Luna se volvió mucho más introvertida, y bailar con su mamá podía ser incomodo… así que agradecía las alocadas fiestas de secundaria donde nadie se daba cuenta de  si se bailaba bien o mal; ella tampoco mencionó que pertenecía al grupo de danza de su colegio en Nápoles, pero no tardaron mucho tiempo en darse cuenta que hacían buena pareja de baile.



<<PART ROCK
YEA
Wooo!!!!
LETS GO!!
Party rock is in the house tonight
Everybody just have a good time
And we gonna make you lose your mind
Everybody just have a good time>>
<<We just wanna see yaa! >>
<<Shake That! >>…
 
Fueron eliminando cada pareja, excepto la número cuatro, seguían bailando sin percatarse de nada más, la vergüenza se fue de sus cuerpos en los primeros minutos, y no lograban distinguir bien el murmullo de aplausos y gritos de apoyo de los que eran protagonistas, porque estaban en una especie de trance ocasionada por el baile. Luna lo veía, admirada de un talento hasta ahora oculto… o al menos en el que ella no había reparado antes; mientras sus amigas se movían un poco al son de la pegajosa canción.

Karlhy bailaba mientras gritaba a favor de la pareja, por eso no se dio cuenta cuando un chico que la imitaba se  acercó hasta permanecer a su lado, cuando la euforia había pasado un poco y la canción casi terminaba comentó << Ellos son geniales, se nota que no son novatos>> lo tuvo que decir casi a gritos, porque la música lo inundaba todo, ella le respondió << Si es verdad>> y al momento volvió su vista hacia él , era un chico de estatura promedio, ojos claros y tez trigueña, las expresiones de su rostro eran finas y lo hacían ver elegante.  <<Me llamo Luka >> dijo siempre entre gritos el recién llegado, <<Y yo Karlhy>>mencionó ella en el mismo tono de voz.

Santiago no compartía la animosidad de la mayoría por ese tipo de concursos, ver cómo la gente se humillaba frente a otra para hacerla reír no era su definición de diversión, cuando estaba a punto de retirarse a pesar de los intentos de Valentina porque se quedaran a ver, se fijó en que la chica que había visto con anterioridad estaba bailando. Observó  las curvas de su cuerpo, el movimiento de su vestido y su cabello en ondas invisibles, era muy atractiva, medio sonrió… sería un primer ciclo interesante.


El baile terminó y sin buscarlo, Frank y Sol resultaron ganadores, él no podía ir a buscar el premio porque Valery no se lo daría a nadie que no fuera de la fraternidad de los chicos, así que fue Sol quien se encargó de ello, tenía una maravillosa energía rodeándola y se sentía tan feliz como no lo había hecho en mucho tiempo, no era el tipo de felicidad que ella vestía en esos días, la optimista y superflua, si no la genuina, quería hablar más con Frank pero cuando lo buscó con la botella de vino caro en la mano, el premio, ya no quedaba rastro de él. 

2 comentarios:

  1. Perdón, perdón, perdón. No había tenido tiempo de leer con calma, luego cuando tuve, lo olvide, pero ya lo leí y estoy comentando ¿eso es bueno, no?

    Primeramente muchas gracias por el regalo de cumpleaños. A pesar de que vengo a comentar muy después, sí me percaté de que era para mí, pero no quería comentar hasta que no hubiera leído.

    Al principio estaba un poco perdida, son muchos personajes, aún me cuesta acostumbrarme a ellos y recordarlos, hasta quizá me haya perdido un poco en el trama, aún así salí viva del capítulo.

    Al principio quería que Santiago se percatara de Sol, pero luego cuando ésta bailaba con Frank -tengo un crush inmenso con él- quise que ya no la ubicara. Es raro. Y por un momento esperé que quién saliera a bailar con su chico misterioso fuera Luna. Ella es la que mejor me cae, hasta ahora.

    Yo debería estar en esa Universidad; ellas llevan un mísero día ahí y WOW chicos guapos por montones, y yo, que ya estuve un año de universitaria no vi ninguno, ni uno sólo. Tal vez tenga que ver que mi escuela no sea tan grande. Espera, espera. Miento. Una vez sí vi un chico guapo, estaba de intercambio, era inglés y Dios, pero ya se regresó a su país, así que no cuenta.

    Siempre suelo comentar cosas que ni al caso, pero bueno. Muy buen capítulo, espero que al siguiente ya no me pierda tanto con los personajes. De nueva cuenta muchas gracias C:

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    1. Sí claro que es bueno! Me alegra mucho saber que te gusto el capítulo, a pesar de los inconvenientes con los personajes, créeme que yo también he tenido algunos problemas porque a veces siento que se me salen de las manos.

      Respecto a Santiago y Sol, pues ellos me agradan juntos, talves logren agradarte más en próximos caps; Frank es un gran amigo, el es un personaje que me gusta mucho, y tenía pensado en darle una historia especial , pero considerando mi pequeño gran problema de exceso de personajes, quizás sea mejor dejárselo de regalo a las lectoras ;), tú qué dices?.

      Luna es un personaje muy complicado, ya lo veras, pero creo que por eso es el más interesante; eso sí su historia de amor sí es mi favorita, tanto que escribí una historia corta de Alex y Luna, quizás la publique... al terminar la novela, ya tengo hasta el capitulo 7 pero nunca me animo a corregirlos, hasta que veo que ha pasado un mes y debo hacerlo para poder actualizar.

      Y jajaja me mató de la risa lo de la Universidad, yo también quisiera estudiar ahí, lástima que solo en mi mente exista ese lugar. Yo ya estuve dos años de universitaria, y los chicos guapos que vi los puedo contar con una sola mano... en realidad solo han sido dos, y por su carácter no tienen nada de príncipes azules.

      Gracias a ti por comentar, por haberte tomado el tiempo de leer mi "nada corta" historia, cualquier crítica o halago son bien recibidos. Yo también espero ser más coherente en el siguiente capítulo, para que nadie se pierda. Creo que publicare pronto, porque ya casi casi estoy de vacaciones :D ... por cierto, tuviste tiempo de leer "El mejor lugar del mundo es aquí mismo" ? si así es, espero que te haya gustado.

      Saludos y hasta pronto.

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